Tras 120 minutos de máxima tensión, pero con un desempeño visiblemente superior del Atlético de Madrid, el tremendo mata-mata ante el Real Madrid se fue a los penales tras un 1-0 del Colchonero (global de 2-2). Y fue en la tanda donde lo que fue un partidazo se redujo a una gran polémica: el segundo tiro desde los 12 pasos del Atleti, ejecutado por Julián Álvarez, fue anulado por un supuesto doble toque y transformó por completo esa definición. Aunque las imágenes no terminan de mostrarlo con claridad...

Tras las conversiones de Kylian Mbappé, Alexander Sorloth y Jude Bellingham, llegó el turno del Araña para la ejecución. Ya le había picado un penal a Thibaut Courtois hace algunas semanas, en el clásico por LaLiga. Pero, en esta ocasión, lógicamente, Julián tiró a asegurar: sacó un potente remate ligeramente orientado hacia la derecha del arquero. Sin embargo, en pleno tiro, se resbaló. Y rápido, los jugadores del Real Madrid comenzaron a acusar un doble toque.

Szymon Marciniak, árbitro del encuentro, entró en comunicación con Tomasz Kwiatkowski, encargado del VAR. Y comenzó el suspenso. Una cámara muestra que Julián, ya abrazado a sus compañeros, fue consultado por Ángel Correa respecto a sí la había tocado o no con los dos pies. "Puede ser. No sé, pero puede ser", respondió el Araña.

Y enseguida, Marciniak hizo la seña que nadie del Atlético quería ver: alzó sus manos y anuló el tiro de Julián. Esa decisión cambió por completo la tanda, no solo porque quebró la paridad sino que también frustró a todos los jugadores del Atleti. Lo llamativo es que ninguna de las repeticiones termina de evidenciar que efectivamente existió un doble toque.

"Nos faltó esa suerte. Julián creo que toca el balón dos veces, que es la primera vez que miro eso desde que veo fútbol. Pero bueno, hay que levantarse", dijo su compañero, Clement Lenglet.

"El pie izquierdo me da la sensación que toca en esa foto muy fina", le dijo un árbitro en off a Olé.

Tras el tiro anulado de Julián, la tanda siguió con las conversiones de Federico Valverde (R. Madrid), Correa (Atlético), el fallo de Lucas Vázquez por una atajada de Oblak, que volvía a poner la serie en tablas, y el posterior tiro errado de Marcos Llorente que volvía a quebrarla a favor del Real. Ya en la ejecución definitiva, Antonio Rudiger la mandó adentro y sentenció 4-2 a favor del Merengue.

Fuente: OLÉ