El líder religioso Giorgio Cesiano destacó que "la chica era un monstruo" y que el joven le golpeó y echó un diente.
El pastor evangélico pentecostal Giorgio Cesiano que asistió el fin de semana a dos jóvenes que protagonizaron un perturbador episodio en la terminal de ómnibus de Mercedes, admitió a Tumercedes haber hecho "dos liberaciones demoníacas".
Ese día "me buscó un móvil del 107 y fui con ellos hasta la terminal", relató, donde dejó en claro que su labor consistió en "dos liberaciones, primero a una chica de entre 18 y 20 años y después a otro muchacho que sería su compañero o pareja".
Aclaró que "no estaban drogados sino que tenían una posesión satánica demoníaca. Le distorsionó la cara a la chica, sangraba por la boca, era un monstruo. El varón estaba peor", sostuvo.
"Quiero destacar la profesionalización de los policías que lograron reducirlos y ayudarme, ya que uno de ellos me aplicó un golpe y me echó un diente".
Le preguntaron si era la primera vez que intervenía en una situación así y destacó que "no, trabajamos mucho con este tipo de liberaciones" y citó el caso anterior de "una señora que vino a la Iglesia que se quería suicidar porque no podía comer nada ni siquiera tomar mate. Le hicimos una oración corta en nombre del espíritu santo y se liberó".
Sobre lo ocurrido el domingo en la terminal de ómnibus detalló que a la chica que se retorcía en el piso "la ungí con aceite de la unción, comencé a orar y reprender después a los 15 ó 20 minutos fue totalmente libre. La levantamos, subió a la ambulancia y fue como que despertó de un sueño. Conversaba normalmente a partir de ahí", explicó el religioso.
Sin embargo "el caso del chico fue más difícil ya que tuve que hacer una rueda de oración con los propios policías que me ayudaron muchísimo. Estuvo difícil e incluso me aplicó un golpe que me echó un diente. Creo que la pareja regresaba de San La Muerte que es un lugar de demonios", describió.