El 20 de noviembre de 1988 fue un antes y un después para Antonio Vidal González. Metió 3 de los 6 goles con los que San Martín de Tucumán goleó a Boca de visitante. Pasaron 35 años de aquella proeza histórica.
Antonio Vidal González sigue presente en el imaginario del futbolero argentino. Uno de los motivos es por aquella proeza de hace 35 años.
Ya son 35 años de una proeza histórica. “Un rival de menor envergadura”. Así presentaba el periodista y relator del partido Mauro Viale al conjunto dirigido por el uruguayo Nelson Chabay.
Claro, el “santo”, que ese mismo año había ascendido del Regional a Primera división sin escalas, venía de caer ante River por 2 a 1.
Sin embargo, San Martín no le hizo caso a los números que daban por ganador al “xeneize” y dio el batacazo ante los porteños. Es más, ya en el primer tiempo lo vencía por 2 a 0. “Concierto de San Martín”, “Aquel grupo de tucumanos seguía cantando y bailando rodeados por hinchas de Boca”.
Así cronicaba LA GACETA lo que sucedía en aquella tarde, que tuvo como gran protagonista al delantero Antonio Vidal González. El misionero, que hacía su primera presentación con la camiseta “rojiblanca”, se despachó con un triplete y se llevó la pelota a casa.
“Vidal González se le escapó a Hrabina y puso el tercero”; “El mismo centrodelantero le robó a (Richard) Tavares y definió por debajo de las piernas de Navarro Montoya, marcando el cuarto”; “Con un derechazo alto clavó el quinto”.
La secuencia de los tres goles del misionero era descrita de esa manera por nuestro diario, para aquellos fanáticos que no podían acceder a la televisión o que habían escuchado los gritos de gol a través de una radio.
“Nunca pensamos en conseguir un resultado así. Nosotros vinimos a buscar el partido y nos teníamos confianza, pero la verdad que a esta goleada no la esperábamos… y creo que nadie”, así declaraba Vidal González a la salida del hotel.
Sin embargo, para entender un poco del abultado resultado, hay que entrar en contexto. Cuando iban 24 minutos del primer tiempo, Juan Simón fue directo a barrer a Ricardo Troitiño y el árbitro Luis Pasturenzi no dudó: roja directa para el actual panelista de ESPN.
Todo parecía alegría en Bolívar y Pellegrini, pero no duró demasiado. En el mismo instante, Hugo Musladini también se fue a las duchas por exceso verbal.
Dos minutos después, Vidal González le ganó en velocidad a Tabares y el central uruguayo le propinó una falta en la puerta del área. Penal y ejecución “cómo manda la historia” de Jorge López para el 1-0 de San Martín: fuerte al medio, inatajable para el “Mono” Navarro Montoya.
Sobre el cierre de la primera mitad, el “santo” aprovechó los espacios por la banda izquierda y decretó el segundo en los pies de Dante Unali. “Las cosas salieron mucho más fácil de lo que pensábamos”, había declarado el cordobés post victoria sobre los de La Ribera.
En el complemento, antes del tercer gol de Vidal González, un Boca confundido y fuera de sí por lo que estaba pasando, terminó de entregar el partido.
A los 59’, Fabián Carrizo cometió una dura infracción y dejó al “xeneize” con nueve jugadores. El delantero misionero aprovechó la superioridad numérica y marcó su triplete.
Si bien a los 79’ llegó el descuento del honor para Boca en los pies de Walter Perazzo, San Martín terminaría de liquidar la historia. Sobre el final, tras una pared con José Campos (que había llegado con lo justo por una lesión e ingresó desde el banco), Unali marcaría su doblete y el 6-1 definitivo que quedará en la historia de los hinchas “santos”.
“Un triunfo espectacular, que sembró una euforia ilimitada en la gente que acompañó al elenco tucumano a Buenos Aires, mientras en nuestra ciudad diversos vehículos cargados con simpatizantes dieron rienda suelta a la alegría en las calles céntricas”, así fueron descritos los festejos del enorme e inolvidable triunfo.
Boca recibió la mayor goleada en La Bombonera desde la creación de su estadio en 1940. Era la segunda vez que San Martín le ganaba a Boca y debido al resultado abultado, se quedó con el mérito de ser el primer club tucumano en convertir seis goles en un encuentro de torneos organizados por la AFA.
La apabullante derrota de Boca fue replicada en todo el país. Muy pocos medios porteños valoraron lo realizado por San Martín, ya que en su mayoría destacaron los errores del “xeneize”.
“El descontrol de Boca agrandó a San Martín” (Clarín), “Ni la hinchada salvó a Boca de la catástrofe” (Diario Popular), “San Martin aportó el fútbol e inteligencia” (La Prensa) y “San Martin le hizo vivir a Boca su tarde más gris” (La Nación).